En esta ocasión no sólo queremos compartir el conocimiento de Martin Seligman sino también la sabiduría de sus palabras en esta, para nosotros,  magnífica intervención en el TED del año pasado.

Martin Seligman junto a Mihalyi Csikszentmihalyi ( a quién ya dedicamos un post ) y , sobre todo, Viktor Frankl probablemente sean  tres de las personas más relevantes y que más han hecho por el estudio y la  investigación de lo que entendemos por  felicidad así como de los mecanismos que en ella intervienen. Gracias a ellos conocemos el significado del concepto  “vida plena” y cómo desarrollar las habilidades necesarias para conseguirla.

Resulta ciertamente clarificador y potente la importancia del conocimiento y puesta en valor de nuestras fortalezas y cómo correlaciona directamente con la vida placentera. El cambio del paradigma de trabajar desde las debilidades hacia  trabajar desde las fortalezas.

Uno de los ámbitos donde podemos encontrar las consecuencias de trabajar desde las fortalezas es en el coaching. Aunque suene a obviedad el primer paso siempre siempre será conocer   cuales son esas fortalezas,  a partir de ese momento  tendremos delante las herramientas con las que trabajar en alcanzar el objetivo fijado en dicho proceso o en cualquier otra situación o desafío con el que se encuentre el coachee más adelante ya que los resultados  son realmente sostenibles en el tiempo al ser éste  un aprendizaje que no se olvida.

Seligman nos brinda una manera de conocer esas fortalezas en el cuestionario  que menciona en la conferencia (http://www.authentichappiness.sas.upenn.edu/Default.aspx)  y que sinceramente os recomendamos realizar.

Qué lástima no se aproveche más este enfoque en las escuelas, universidades y educación en general donde realmente se pudiera desarrollar el talento de cada persona y los educandos aprendieran a capacitarse para una vida que sólo van a tener la oportunidad de vivir una vez y que para vivirla de la manera más plena posible requiere el desarrollo de una serie de capacidades y valores, pero como Seligman no nos perdonaría lamentarnos en un artículo cuyo fondo es la psicología positiva he de decir que afortunadamente cada vez son más las personas que aportan sus pequeños granos de arena a esos cambios en la manera de ver y entender las personas, las organizaciones  y la educación en general, desde la creación de plataformas como la de Jose Antonio Marina, pasando por la creación de fundaciones para la mejora del sistema educativo o grupos en redes sociales sin olvidar las innumerables actuaciones y aportaciones de muchas personas en el día a día.  ¿Utopía o vida significativa?.

Me gustaría terminar con la reflexión que hace Seligman casi al final de su intervención a cerca de la productividad de las empresas y su relación con las emociones positivas, el engagement y la significación ya que estamos convencidos, y así lo hemos constatado, que se obtienen mayores resultados y más sostenibles en el tiempo cuando se trabaja  sobre las variables que  construyen escenarios organizativos positivos que cuando se trabaja sobre disminuir la infelicidad, desmotivación o falta de compromiso.