Hagamos historia: Esta es la historia de un médico inglés que tuvo la paciencia de esperar 42 años a que la Armada Británica aceptara e implantara sus consejos para que los marineros embarcados en largas travesías no murieran de una enfermedad que era conocida como el “mal del marinero” y que ahora sabemos que se trata del escorbuto. Este médico fue James Lind.
¡¡Vaya!! ¿Tú hubieras sido capaz de haber esperado tanto a que te tuvieran en cuenta, aún sabiendo que estabas en lo cierto, teniendo que defenderte de tanto desconcierto? Desgraciadamente la historia está plagada de ejemplos de mentes brillantes, adelantados o no a su tiempo, que tuvieron que esperar a que o las comunidades científicas, o los estamentos políticos, o la sociedad en general fueran capaces de sumarse a otras realidades, por estar secuestrados por sus propios paradigmas.
Por otra parte, lo que era correcto ayer… igual mañana es lo contrario y viceversa. Todo cambia y evoluciona porque la nada está llena de todo y en ese todo lo que antes no era nada, ahora lo puede ocupar todo. Tenemos que comprender que lo nuevo no es más que la transformación de un presente que busca su espacio y presenta su candidatura para liderarse en el futuro.
¿A caso un E-Q-U-I-P-O no está inmerso, cada cual, en su TRAVESÍA?. ¿Cuánto tiempo le llevará su expedición?. ¿Cómo se van a nutrir para evitar el ESCORBUTO DE EQUIPOS? .
Te vamos a poner a tu disposición un recetario de distintas VITAMINAS C que ayudarán a tus Equipos a fortalecer su sistema inmunológico, evitar oxidarse, permanecer vitales y joviales y facilitar la curación de sus heridas. Así que vamos a comenzar:
- Coexistir
Debemos de dar espacio a los componentes del equipo para que puedan ser ellos mismos y puedan existir, sin la necesidad de anular o anularse entre ellos, mientras coinciden en el tiempo y en la organización.
- Convivir
Establecer códigos de comportamiento para relacionarnos, ayudarnos, regularnos y para que podamos trabajar en compañía facilitará la armonía del Equipo en la organización.
- Cohesionar
Ser congruentes y coherentes en el decir y el hacer, en el pensar y sentir serán clave para “re-unirse” y adherirse en torno a una cultura que nos quiera representar a todos y nos sintamos identificados.
- Cobijar
Sentirse protegido sabiendo que estamos haciendo lo necesario para hacer que nuestro Equipo se encuentre seguro ante posibles inclemencias y ponernos a salvo frente a todo tipo de peligros es una garantía para dar garantías.
- Compilar
Ser capaces de juntar la diversidad, lo distinto y peculiar que nos hace diferentes, para construir equipos innovadores y creativos es una fuente inagotable de ideas y oportunidades.
- Configurar
Producir una marca más allá de un logotipo. Crear Equipos con un espíritu artesano capaces de ser auténticos mostrándose preparados para personalizar sus productos y servicios.
- Construir
Disponer de planes y propósitos son los cimientos para la realización de cualquier proyecto. Edificar es la consecuencia de construir relaciones que ayuden a crear escenarios donde desarrollar el crecimiento personal, profesional y empresarial.
- Contribuir
Si de manera voluntaria y espontánea los miembros de un Equipo aportan su ayuda para lograr los fines de la organización, estaremos siendo realmente solidarios siendo partícipes de manera proactiva en el éxito de nuestro trabajo.
- Colaborar
Para multiplicar primero hay que aprender a sumar. Para sumar en Equipo el orden de factores sí altera el producto. Es necesario Coordinarse (10) y Cooperar (11). Con el primero, nos ordenamos y priorizamos como conjunto elaborando estrategias. Con el segundo sumamos y unimos talentos. Con los dos, Coordinación y Cooperación, pasamos de sumar a multiplicar. La Colaboración es el resultado de un querer hacer haciendo.
- Consolidar
Para fortalecer y dotar de solidez a nuestra organización es necesario que nuestro Equipo integre e interiorice todos los principios y valores que les definen y por los que han sido creados, para Cohesionarse en algo definitivo, estable y duradero.
- Compartir.
Cuando el Equipo se divierte y disfruta de su comunión y de su comunidad dar, ofrecer, repartir y reconocer produce una participación Colaborativa que aporta un valor añadido a la organización difícil de imitar.
- Cocrear
La creatividad y la innovación son fundamentales bien para producir algo de la nada o de algo ya existente dotarlo de nuevas visiones y versiones. Un Equipo que sueña es un Equipo despierto.
- Conectar
Los Equipos altamente efectivos son altamente afectivos. Son capaces de crear lazos sin nudos, creando vínculos para tejer un “Tendido Eléctrico Emocional” que les aportará una fuente de energía renovable, sostenible, reciclable e inagotable.
- Contagiar
Los Equipos se mueven por contagio y se lideran por inspiración. Cómo se transmiten las ideas, los sentimientos y las actitudes determinan el grado de implicación y multiplicación de los Agentes Activos dentro del Equipo, porque enseñamos lo que sabemos pero contagiamos lo que vivimos.
- Comunicar
Si aceptamos el hecho de que nos comunicamos del mismo modo que nos comunicamos a nosotros mismos, es vital que reflexionemos como transmitimos nuestros mensajes. Nuestra comunicación debe ser cercana, natural, cálida, cautivadora, seductora, sorprendente y apasionada para atraer sin convencer y proponer sin ordenar. Algo también vital es cómo nos escuchamos, lo que significa valorar cómo nos interpretamos, entendemos y percibimos los unos con los otros.
- Conocer
Si ignoramos más de lo que sabemos porque el conocimiento bien entendido nos puede hacer más sabios sin caer en la soberbia, humildemente debemos de aceptar que jamás vamos a ser un producto acabado. Para enseñar a enseñar hay que aprender a aprender. Dicho de otro modo: para enseñar a aprender es preciso aprender a enseñar.
- Corazón
Debemos de trabajar por y para los demás como si trabajáramos para nosotros mismos, añadiendo valor a las personas con las que trabajamos. Hacer las cosas con amor, generosidad y bondad es la esencia de la prosperidad, la genialidad, la estabilidad, la hermandad, la humildad, la fertilidad, la utilidad, la amabilidad, la curiosidad, la espontaneidad, la felicidad, la flexibilidad, la jovialidad, la productividad, la sensualidad, la serenidad, la responsabilidad, la credibilidad, la exclusivad, la vitalidad, la incombustibilidad, la tranquilidad, la diversidad, la confiabilidad, la honorabilidad, la vigorosidad, la autenticidad, la duplicidad, la durabilidad, la plasticidad, la vistosidad, la perdurabilidad, la mensurabilidad, la atemporalidad, la prodigiosidad, la respetuosidad, la veracidad, la autoinmunidad, la direccionabilidad, la interactividad, la humorosidad, la pluralidad, la gobernabilidad, la ejemplaridad, la solidaridad, la profesionalidad y la espiritualidad.
*Ah! Y la última y más irreverente de las vitaminas C es la de Cojones: sí, porque hace falta valor para renunciar al ego individual que mata a tantos equipos que teniéndolo todo arrojan un superávit de Egos que hacen colapsar la Química necesaria para producir esa mágica sensación de que juntos somos «algo» que vale la pena cuidar.
